Significado de la corona de Adviento
- En muchas casas vemos que antes de
Navidad ponen como centro de mesa una corona con velas. Además de ser un
elemento decorativo, esta corona anuncia que la Navidad está cerca y debemos
prepararnos.
La costumbre es de origen pagano, esta corona representaba el ruego al sol para
que regresara con su luz y calor durante el invierno. Los cristianos, para
prepararnos a la venida de nuestra LUZ y VIDA, la Natividad del Señor,
aprovechamos esta "Corona de adviento" como medio para esperar a Cristo y
rogarle infunda en nuestras almas su luz.
- El círculo es una figura geométrica perfecta que no tiene ni principio ni fin
La corona de adviento tiene forma de círculo para recordarnos que Dios no tiene
principio ni fin, reflejando su unidad y eternidad. Nos ayuda también a pensar
en los miles de años de espera desde Adán hasta Cristo y en la segunda y
definitiva venida; nos concientiza que de Dios venimos y a Él vamos a regresar.
- El follaje verde perenne (que puede ser de ramas de pino, oyamel o hiedra)
representan que Cristo está vivo entre nosotros, además su verde color nos
recuerda la vida de gracia, el crecimiento espiritual y la esperanza que debemos
cultivar durante el Adviento.
- Las cuatro velas representan los cuatro domingos de Adviento. Las tres
primeras que se encienden son de color morado para recordarnos el espíritu de
vigilia, penitencia y sacrificio que debemos tener par prepararnos a la llegada
de Cristo. La última es de color rosa o blanco y manifiesta la alegría de que el
nacimiento del Señor está muy cerca. El día de Navidad las velas moradas son
substituidas otras de color rojo que simboliza el espíritu festivo de la reunión
familiar. En algunos todas las velas se substituyen por velas rojas y en el
centro se coloca una vela blanca o cirio simbolizando a Cristo como centro de
todo cuanto existe.
- La luz de las velas simboliza la luz de Cristo que desde pequeños buscamos y
que nos permite ver, tanto el mundo como nuestro interior. Cuatro domingos antes
de la Navidad se prende la primera vela. Cada domingo se enciende una vela más.
El hecho de irlas prendiendo poco a poco nos recuerda como conforme se acerca la
luz las tinieblas se van disipando, de la misma forma que conforme se acerca la
llegada de Jesucristo que es luz para nuestra vida se debe ir esfumando el
reinado del pecado sobre la tierra. La luz de la vela blanca o del cirio que se
enciende durante la Noche Buena nos recuerda que Cristo es la Luz del mundo. El
brillo de la luz de esa vela blanca en Navidad nos recuerda como en la plenitud
de los tiempos se cumple el “ADVIENTO DEL SEÑOR”